350 gr de patatas, peladas

500 gr. bacalao

2 dientes de ajo finamente picados

4 cucharadas grandes de perejil picado

1 taza de leche, calentada

½ taza de aceite de oliva

migas de pan del día anterior

PREPARACIÓN

Poner a remojar el bacalao dos días anteriormente, cambiar el agua fría dos o tres veces cada día.

Preparación: Cubrir las patatas con agua fría y llevarlas a la ebullición, rebajar el fuego y cocinar lentamente unos 20 minutos hasta que queden tiernas.

Cubrir el bacalao con agua fría, añadir una hoja de laurel y una ramita de tomillo y llevarlo a la ebullición, taparlo y quita del fuego. Dejarlo cubierto unos 10 minutos, sacar el bacalao y mientras este caliente, quitar las espinas y despedazarlo. Machacarlo en un mortero.

Calentar el horno a medio alto. Sacar las patatas y machacarlas en un recipiente. Añadir el bacalao, el perejil y el ajo con pimienta negra al gusto. Empezar a añadir el aceite y la leche. Incorporándolos bien en pequeñas cantidades. Una vez incorporados, debe de quedar ligera la mezcla. Añadir sal a gusto.

Meter la brandada en una cazuela untada con un poco de aceite. Esparcir con las migas. Meterla en el horno hasta que quede dorado, unos 10-15 minutos. Tambien puede comerse sin la etapa final en el horno, con rebanadas de pan tostadas frotadas con ajo crudo.

Figura dorada perteneciente a un servicio de mesa de Pedro Felipe Thomire