La borla morada
La Jodis [@] [www]

Un ropavejero andaba por el camino, tiene los pantalones rotos, una sonrisa amarga y la barba crecida como si nunca hubiera existido afeite. Cada vez que encontraba algo , soltaba los dientes, mostrando la carcomida dentadura. 
El ropavejero tenía un muñeco que le acompañaba todo el tiempo.
A veces le miraba preguntando:
-¿Es cierto que sonríes siempre?- el muñeco apenas le hacía un guiño con su ojo de vidrio.  El ropavejero satisfecho seguía su camino. Cuando encontraba una cruz de camino volvía de nuevo a ver al muñeco.
- ¿Adónde iremos amigo?- separándose un poco del ropavejero y viendo hacía lo lejos, señalaba el camino con el dedo enguatado por la felpa. Mientras el ropavejero caminaba el muñeco se movía tambaleando en su espalda.
Un día el muñeco desapareció de pronto, el ropavejero le busco, volvió sobre sus pasos, encontró apenas una borla morada. Con un alfiler se ha unido la borla, susurra palabras al viento, comprendió todo en seguida ,el muñeco había desaparecido en busca de otros caminos, desde entonces él le guarda luto mientras sigue andando.

 

Faro

Puente

Torre

Zeppelín

Rastreador

Nuevos

Arquitectos